REDIMIRE: REVELACIONES

 20/12/20 20:41

Efedrina me construyó un camino. Me coroné la Reina de la partida. 

Jaque mate.

Terminó el monólogo del mensajero. 

El mundo está lleno de hijos de puta. No hay más hijos de estas madres porque no hay más putas. Hay quien quisiera ser hijo de estas madres, que son sagradas, pero putas. Se venden, como esos hijos de madre puta pero sin serlo. Venden a su madre y la hacen puta. 

Armé una historia con el camino. Un camino de adelfas. Veneno de "maestros", que así gustan de hacerse llamar; en la cima del monte de Ador. El Corona, se llama. 

Alguien dijo que me suicidé, tirándome al vacío desde aquel monte. Nada más lejos de la realidad, ya que salí de un infierno para proclamarme libre, aunque secuestren mis cosas. Las cosas son solo eso, cosas.

En aquel infierno descubrí una traición, sobre unas vías férreas, en Zaragoza. 

Crecían hongos sobre la piedra, en una isla, donde una luna sentada en la rueda observaba el reflejo crucificado de la copa de la que bebí, pero no estaba sola...

Han venido con la nueva línea. En cuanto me sale el perrito lo sé. 

La flaca está más flaca, pero más avispada que en su puñetera vida. Si quieren venir, que vengan de frente, que me queda la fe y el aliento divino para defenderme de estos hijos de puta.

 Ahora, el que espía mis escritos en borrador que informe de mis intenciones. 

Siempre me metes la misma mierda, en todos los perfiles.